¿CÓMO SON LOS BOLARDOS DE NUESTRAS CIUDADES?
Antes de adentrarnos en materia conviene exponer una breve descripción de qué es este elemento del mobiliario urbano.
Los bolardos sirven para delimitar y proteger las zonas peatonales con respecto a aquellas destinadas al vehículo. Además, de impedir que éste aparque en espacios reservados al tránsito de peatones.
Un problema grave que puede surgir al instalar los bolardos son las consecuencias que tienen en las personas con baja visión porque si éstos no son fácilmente detectables a través de un adecuado contraste cromático y/o sus dimensiones son incorrectas pueden provocar tropiezos y caídas. Pero no sólo a este colectivo, imagínate que vas andando mirando el móvil, de repente te encuentras el bolardo y te provoca un golpe, es una situación cotidiana que seguro que muchos de vosotros y vosotras habéis sufrido.
Con todo ello queremos reflejar que es muy importante que el mobiliario urbano, concretamente los bolardos, sean accesibles y detectables porque así no conllevará a ningún impedimento para poder transitar con seguridad por los itinerarios peatonales.
Según la Orden TMA/851/2021, en el Capítulo VIII de Mobiliario urbano en el art 29 se muestran los requisitos de accesibilidad de los bolardos:
“Los bolardos instalados en las zonas de uso peatonal se ubicarán de forma alineada, tendrán una altura situada entre 0,75 y 1,00 m, un ancho o diámetro mínimo de 10 cm y un diseño redondeado y sin aristas. Su color contrastará con el pavimento en toda la pieza o, como mínimo, en su tramo superior, asegurando su visibilidad en horas nocturnas.”
¿Qué pensáis de estas especificaciones? ¿Son suficientes o incluirías alguna más?
Desde nuestro punto de vista, son bastante genéricas. En cuanto a dimensiones sí que se dan detalles exactos pero del contraste, forma y ubicación apenas se menciona nada y esto conlleva a que podamos encontrar una gran variedad de bolardos en nuestros entornos urbanos e incluso dentro de una misma ciudad y desgraciadamente muchos de ellos no son accesibles.
Aquí tenéis un pequeño extracto de la cantidad de tipos de bolardos que puedan existir y que hemos podido recopilar para compartirlos con vosotros y vosotras:
Como podéis apreciar vemos distintas formas, algunas de ellas no cumplen las dimensiones. En la mayoría de ellas apenas el contraste cromático está presente por lo que pueden ser un gran peligro.
Con respecto a la ubicación, destacar que hay bolardos que no permiten el paso de los peatones, por ejemplo aquellos que se encuentran en mitad de los pasos de peatones. Lo correcto es que se instalen sólo en los extremos de los pasos de peatones.
Además, resaltar que en muchas plataformas únicas de convivencia del peatón y del vehículo se instalan los bolardos para diferenciar esas zonas cuando no es necesario ya que en dichas calles la prioridad es del peatón por lo tanto éste puede transitar por toda la calle con seguridad, pero no siempre es así….
El tema de los bolardos conlleva a muchas discusiones de: bolardos sí, bolardos no… cualquier tipo se puede utilizar o no… se pueden ubicar en distintos puntos de las calles o sólo en sitios específicos… como veis los bolardos dan mucho para hablar.
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