La accesibilidad en los cruces e intersecciones

Divulgación

Cuando vamos recorriendo nuestras ciudades, yendo de un lugar a otro, nos encontramos con itinerarios peatonales que nos permiten cruzar las calles. Sin embargo, ¿diremos que son accesibles? A esta pregunta responderéis vosotros al final del texto….

Debemos poner de relieve la necesidad de que estos puntos deben sean seguros y a la vez accesibles, porque no podemos olvidar que la seguridad y la accesibilidad deben ir de la mano cuando se diseñan y planificar entornos y espacios públicos.

Os proponemos un reto: Elegid un paso de peatones de vuestra localidad y analizad si existe o no accesibilidad en cada uno de los elementos que lo integran.

Pero antes, os damos unas recomendaciones para tengáis en cuenta:

1)      En los semáforos:

- Primero, hay que indicar que los semáforos no son obligatorios, así lo contemplan las normativas autonómicas.

-Es preciso que sean fácilmente localizables y que su ubicación no suponga un obstáculo.

-Para aquellos que sea necesario accionar un botón, deben permitir la aproximación y el alcance. Un aspecto crítico es la botonera, no debe estar a una altura muy elevada porque una persona en silla de ruedas o un niño no van a llegar a ella y aspecto tan relevante de la movilidad.

-La mayoría de los semáforos deben emitir una señal acústica indicadora del tiempo de paso para peatones, a petición del usuario mediante un mando a distancia. Nosotras también indicamos la necesidad de señalización visual dónde se proyecte la cuenta atrás del tiempo que permanece en verde para poder cruzar.

-El tiempo de cruce debe ser el suficiente para que cualquier persona pueda atravesar el paso de peatones sin riesgo de sufrir un atropello. Se recomienda que sea menor a 0,8 m/s. Hay que recordar que no todas las personas pueden deambular con la misma velocidad.

2)      Señalización y visibilidad.

- Los pasos de peatones deben estar señalizados tanto horizontalmente como verticalmente para los peatones y vehículos. Por ejemplo, con un correcto mantenimiento de la pintura y con señales que indiquen que ahí hay un paso de peatones.

- Sobre todo, las personas con discapacidad auditiva necesitan observan cuando viene un coche, si está parado o en movimiento….por lo que la visibilidad es primordial que sea óptima y que se permita siempre el contacto visual.

 

3)      Vados.

- Se consideran accesibles cuando la anchura sea mínimo 1,80 m, las pendientes máximo un 8% y un 2%, la longitudinal y transversal respectivamente.

Es decir, deben tener un espacio suficiente para que las personas puedan circular sin problema, por ejemplo ensilla de ruedas, andadores, carritos de bebés…

- Los vados peatonales deben tener un pavimento con textura y color diferenciados. Para ello, se instalan los pavimentos táctil direccional y táctil de botones.

El primero, son hendiduras rectas y paralelas y se le denomina direccional porque te va guiando hasta el de advertencia (de botones). Si el encaminamiento está en el sentido de la marcha, sirve para  localizar cambios de nivel. Si por el contrario, es en el sentido transversal al sentido de la marcha, sirve para indicar que nos aproximamos a un elemento relevante en nuestro camino.

El segundo, tiene un relieve en forma de círculo o botones, debe ser igual de ancho que el vado y se instalará en el recorrido peatonal transversal, nos advierte de que vamos a entrar en el paso de peatones o que hay cambios de dirección.

Hay que tener mucho cuidado con la instalación de estos pavimentos, porque muchas veces provocan el efecto contrario que es el de desorientar y que la persona no sepa dónde está ubicada. Las personas con discapacidad visual o ciegas son las principales sufridoras de estas situaciones. La finalidad de estos pavimentos es que sean fácilmente detectables por las personas con discapacidad visual que necesitan de un bastón.

4)      Nivel del paso de peatones.

Tanto si el punto de cruce está a nivel de calzada como si es un paso de peatones elevado, en el inicio y el final no debe existir ninguna barrera con la acera, pero ¿Cómo lo conseguimos ? En el primer tipo, realizando rebajes en la acera y bordillos.

Y en el segundo, que el paso elevado durante toda su longitud esté a la misma altura de la acera. Es muy habitual, encontrarnos en este tipo al final del paso elevado una bajada y luego una subida con el escalón. Esta bajada se debe a que por ahí circula el agua pero que una muleta, una silla de ruedas, un carrito de un bebé o un bastón se queden encajados y conlleven a caídas. Una solución, podría ser la instalación de placas de aluminio u otro material que resista bien las condiciones climatológicas en estos puntos y así por debajo corre el agua y el paso elevado está a la misma altura de la acera.

5)      Obstáculos.

No deben existir obstáculos que dificulten el tránsito, reduzcan el ancho del paso de peatones o sean difícilmente detectables.

6)      ¿Es posible integrar la accesibilidad cognitiva?

Diremos que sí. Aquí os dejamos una propuesta de TEAVIAL http://teavial.es/Son una secuencia de pictogramas ordenados de forma lógica, con tamaño y color adecuado, sobre la primera franja blanca de los pasos de peatones. En los pictogramas encontramos los mensajes de: Para, mira, coche parado, cruza. Son idóneos para aquellas personas que tienen dificultad en comprender el significado de los pasos de peatones, como personas con TEA o deterioro cognitivo.

La imagen muestra un paso de peatones con una secuencia de pictogramas y texto de : Para, Mira, Coche parado y cruza.

Ahora te toca a ti aceptar el reto, ¿te animas?

Esperamos imágenes y comentarios de los pasos de peatones que habéis elegido. Podéis hacérnosla llegar a nuestras redes sociales.